Por la mañana celebramos una Eucaristía dentro del Santuario. Posteriormente, tuvimos tiempo libre para disfrutar del entorno, comer, descansar y coger fuerzas para la hora de juegos que nos esperaba antes de celebrar la despedida con una breve oración también en el Santuario.
Este año debemos resaltar que tuvimos el gran privilegio de ser acompañados, además de por todos los centros de JMV Cantabria, por el recién elegido Director Nacional de la asociación, el Padre Paúl D. José Francisco Orozco y la delegada nacional de la asociación, Sor Isabel María Higueras